Omicron amenaza la gastronomía del Perú

Omicron amenaza la gastronomía del perú haciéndolo el país más vulnerable del mundo contra esta nueva variable de SARS-CoV-2 y observando su magnitud que está demostrando Omicron en Europa y los EEUU. El Perú entra en emergencia e incertidumbre por 3 fuertes razones:

  1. El Perú es el país que lidera en todo el mundo con la mayor cantidad de muertes en relación a su población total según las estadísticas en tiempo real mostradas por Worldometer.
  2. El Perú tiene el peor sistema de salud, infraestructura y capacidad de respuesta ante una ola de contagios.
  3. La vacuna Sinopharm usada en el Perú no tiene actividad neutralizadora contra Omicron según el estudio temprano que aún no ha sido revisado por expertos.

El 29 de noviembre del 2021, Tedros Adhanom, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), anuncia con mucha preocupación:

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido del riesgo “muy alto” que supone la expansión de la variante Ómicron del coronavirus, que según este organismo podría tener “consecuencias graves” en algunos territorios.

BBC News da una alerta mundial, dando a conocer las serias consecuencias de la variante Omicron. “los científicos comenzaron una carrera contrarreloj para averiguar si ómicron (antes conocida como B.1.1.529) es más contagiosa, más letal o capaz de evadir el efecto de las vacunas.”

El 17 de diciembre 2021, CNN anuncia que el estudio más reciente de científicos en los EEUU determinaron que la variante Omicron es resistente a las 4 vacunas Pfizer, Moderna, Johnson & Johnson y AstraZeneca, y que también es resistente a las personas que pasaron por la enfermedad, es decir, pueden tener las mismas consecuencias que una persona sin estos anticuerpos propios de la enfermedad.

Dado estas alertas, en menos de 2 semanas los bares y restaurantes de Londres deciden cerrar a medida que ómicron arrasa con el Reino Unido. En los Estados Unidos no es la excepción. Las autoridades ya están tomando las medidas cautelares para el próximo cierre de restaurantes y esto se suma a las renuncias masivas que ha sufrido en el último mes llamado como The Great Resignation. El resto de países cómo Australia, Alemania toman medidas anticipadas reduciendo a 10 personas en locales cerrados o reuniones de grupos, mientras que el Sector Turismo en Europa entra en un nuevo momento de incertidumbre.

La Organización Mundial del Turismo (OMT) y la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) pidieron a los gobiernos que levanten “de inmediato” las restricciones “ineficaces y discriminatorias” a los viajes y vuelos internacionales, que fueron dictadas de urgencia hace dos semanas en respuesta a la alarma por la variante ómicron.

Pero según la OMT, el sector turístico mundial se encamina a perder unos 2 billones de dólares este año por los efectos de las restricciones anticovid, que difieren de un país a otro, una situación que crea confusión, según la organización, pero no piensan en correr el mismo error 2 veces que se cometió con SARS CoV-2.

En menos de 2 semanas Omicron ha golpeado fuertemente a una economía debilitada por COVID-19, logrando el 21 de diciembre la insostenibilidad de Wall Street, uniéndose a la caída bursátil mundial por ómicron. Una caída mundial de los mercados financieros en medio de preocupaciones en torno a qué tan intenso será el impacto de la variante ómicron, de la inflación y de otras fuerzas sobre la economía.

¿Qué les hace pensar que en el Perú será distinto?

El Perú es un país que en la actualidad vela por la ausencia de un líder que nos pueda sacar de esta crísis. MINCETUR que debería velar por la recuperación del sector turismo y HORECA, no genera iniciativas que demuestren impactar positivamente el sector, están sesgados con su iniciativa de Turismo y comercio sin fronteras. El Perú necesita reinventar los restaurantes al 2022.

Las asociaciones peruana de hoteles, restaurantes y afines en el Perú, AHORA Perú, junto al resto de asociaciones del sector gastronómica están ausentes, no se dan cuenta que omicron amenaza la gastronomía del Perú, y sin anticipar medidas preventivas en caso que en un futuro se presente una cuarentena, como lo están viviendo en Europa.

Este es el mejor momento para contar con un plan de contingencia y negociaciones con MINCETUR donde “NO se prohiba el cierre de restaurantes ante un posible ataque de futuras variables como Omicron, y se entienda que este sector está preparado y lo ha demostrado para poder atender con delivery sin aumentar el riesgo.”

Estas asociaciones están en el deber y obligación velar por los intereses de todos los restaurantes como representantes de sus asociados y que representan a la mayoría del sector.

El sector HORECA no está en condiciones de aguantar un cierre temporal, esto puede dañar a un gran porcentaje de restaurantes y afines.

Este es el momento ideal para presentar un proyecto ley a favor de los restaurantes, pero debe ser presentado por las asociaciones reunidas y en conjunto y aprovechar que algunos congresistas con grandes habilidades ejecutoras de eficiencia y rapidez como los congresistas Susel Paredes y Edward Málaga del partido Morado, que lograron consumar el 10 de diciembre, el iluminado proyecto ley que busca garantizar el bienestar de las gallinas ponedoras y propone las condiciones mínimas para su crianza, están abiertos a escuchar proyectos de toda índole.

Para mis amigos de Asociación para el Rescate y Bienestar de los Animales (ARBA) y ONGs, apoyo su proyecto, y les agradezco que se haya consumado, dado que apertura a un sin número de proyectos futuros que puedan ser aprobados con la misma velocidad si se demuestra que son de igual o mayor importancia teniendo como centro, el ecosistema.

Es momento que los restaurantes den un paso adelante de lo informal a la formalización para garantizar su sostenibilidad en un futuro cercano y lleno de incertidumbres.

En febrero estaremos seguros si Omicron impactará en el Perú con la certeza que está sucediendo en Londres, pero ustedes pueden ir sacando sus conclusiones.